— Bilbao 2020 —
Hemos aguantado como unos campeones. Ya nos queda poquito. Tenemos que seguir cuidándonos mucho pero tambien tenemos que pensar en la vuelta.
El COVID19 llegó con fuerza. Una bofetada de realidad que nos dejó plantados en casa durante (por ahora) dos meses. Para alguien cuya vida está ahí fuera, en los bosques, en las montañas o en las costas, estar tanto tiempo sin visitar esos sitios ha sido duro. Pero nada comparado con lo que han sufrido los que han padecido y padecen esta enfermedad. Por todos ellos, estamos de vuelta.
La cuarentena
Aun anhelando el exterior y mis fotos, he de decir que mi cuarentena me ha permitido hacer muchisimas cosas de esas para las que nunca tenemos tiempo: Ordenar y limpiar el catálogo, revisar fotos antiguas, actualizar el porfolio… Pero, sobre todo, disfrutar de estar con mi mujer más tiempo que nunca. Al principio, al ver las perspectivas del confinamiento, veía una cuesta muy dura. Yo, por suerte, puedo decir que no lo he llevado nada mal y que, de hecho, me ha aportado mucho. Primero, como a todos supongo, valorar aun más el instante. Aprovechar lo que puedas hacer ese día, nunca sabes cuándo será tu última puesta de sol asi que, si ya tenía esa filosofía, ahora aun más. Por otro lado he ayudado a crear junto con mis compañeros de grupo RGBaske Team, un grupo que seguro que va a dar mucho que hablar y con el que hemos comenzado un podcast que ya lleva 8 capitulazos.
Positivo
Todas las situaciones de este tipo tienen mucho de componente mental. Es fácil caer en el abatimiento y la desgana, pero hay que sacar fuerzas para ser creativo todos los días. Porque claro que en el bosque se pueden hacer unos vídeos maravillosos, pero desde tu casa, también. ¿No te lo crees? ¡DENTRO VÍDEO!
De vuelta
De vuelta tenemos un camino largo y muy duro. Tendremos que enfrentarnos a seres queridos que ya no están, a una falta de trabajo importante y, porqué no decirlo, a un cambio en nuestras rutinas importantes. Pero el mundo no se para ni nos va a esperar. Tenemos que ir dando pasos mentales para prepararnos. Un calentamiento para que, cuando el mister nos llame, podamos dar todo en el campo. Preparaos, disfrutad y, sobre todo, disfrutad de los vuestros. Mucho. Siempre.