— Bilbao 2018 —
Dedicar tiempo a analizar y corregir errores nos hará crecer. Puedes aplicarlo a la fotografía y a cualquier ámbito de la vida.
Hace unos días participé en el 24 Hours Project, un proyecto fotográfico solidario del que hice un fantástico post. Lo de fantástico lo digo yo, porque comentarios no me habéis dejado ninguno todavía (guiñoguiñocoditocodito). El caso es que fue una muy buena experiencia, pero no terminé del todo satisfecho con mi trabajo. ¿Por qué? ¿Qué salió mal? ¿Qué cambiaría? Vamos a analizarlo.
Errores de selección
La mejora de selección ha sido mi gran aprendizaje de este evento. Aunque estemos agotados, debemos hacer el esfuerzo de escudriñar todas nuestras imágenes antes de elegir «la buena». Dedicar más tiempo a esta tarea nos reportará mucha más calidad a la larga.
Error completo y absoluto por mero empecinamiento. Muchas veces nos centramos en la última imagen que hemos tomado y nos olvidamos de las que tenemos un poco más alejadas de la memoria. Recuerda: Revisa TODAS las opciones.
Valoré publicar la imagen de la libreta pero me cegó la ilusión de mostrar el rostro de Ester. La imagen de la libreta cuenta una historia mucho más potente… Pero es que Ester… ¡UN BESO ENORME, ESTER!
Aquí he tenido más dudas porque si bien es cierto que el momento de la derecha dice mucho más (estar a tu lado cuando empiezas) el gesto de la niña en la publicada me parece más estético.
Tenía las dos opciones y me decidí por potenciar el mensaje. Viéndolo reposadamente, creo que hubiese sido mucho mejor por la opción que le da todo el protagonismo a ella.
¿Debí haber editado?
Esta pregunta es un poco trampa. Todas las fotos subidas son jpgs directos de cámara. Claro que me hubiera gustado editar tranquilamente pero, siendo sinceros no creo que hubiera sido capaz de mejorar mucho las imágenes editando a la carrera en un móvil. Sin embargo, me parece interesante comparar y extraer conclusiones.
La posibilidad de potenciar el contraste de color hace la imagen mucho más potente. Creo que en este caso la edición hubiera sido recomendable pero es una imagen compleja en su edición porque hay que tener mucho ojo con los tonos.
Quizá esta imagen sea la que más edición necesitaba. Las condiciones de luz con una fuerte dominante cálida hacía muy difícil conseguir un tono de piel adecuado. De nuevo, una edición compleja con «split tones» de por medio.
Más que de edición, creo que esta imagen debería haber tenido un recorte más adecuado. Aquí si que podía haber optado por la edición móvil o simplemente elegir otro recorte en Instagram.
La imagen cambia completamente al enderezar las líneas y darle un tono mucho más natural a la piel. El cambio es evidente, pero la edición de nuevo es compleja.
Creo que puedo sacar como conclusión que en eventos de este tipo, queda descartada la edición entendida como un trabajo complejo de atención al detalle. Las correcciones necesarias necesitan de un visionado reposado de la toma y de una precisión que no compensa el esfuerzo cuando vas tan justo de tiempo.
En el próximo evento trataremos de ajustar lo máximo posible la toma original al resultado que queremos, por lo que tenemos que explorar mucho más a fondo cómo genera nuestra cámara los jpgs, teniendo en cuenta los ajustes básicos (sombras, nitidez, luces altas…) y, sobre todo, el perfil de color a utilizar en cada toma.
Buenas ideas, y si bien es cierto que requiere cierto tiempo la edición, tu conclusión final es definitiva: si la foto requiere esa dedicación posterior, es posible que haya que dedicar un poco más a la toma antes de realizarla. De esta manera la imagen resultará más natural. Pero por otro lado hay instantes que son efímeros, y la toma no se puede repetir. Si requiere edición, no hay razón para evitarlo. Al menos desde mi punto de vista.
El problema está cuando sabes que el potencial de la toma está ahí y te empeñas en utilizarla porque tú sabes el potencial… Pero puede que sin la edición adecuada los demás no lo vean. Muchas gracias por comentar. ^^